viernes, 28 de enero de 2011

El trabajo como valor VII: alejando la zanahoria

En cuanto leí el ensayo de Bob Black noté que en mi post "El trabajo como valor VII: el avance tecnológico (Rifkin y otros)", había una afirmación poco clara.
Mi afirmación es "Y por más que nuestros docentes insistieran de que no era estrictamente cierto que esos empleados tuvieran motivos para temer, la realidad es que sí los tienen y en muchos casos, los temores se hacen realidad tarde o temprano."

Tanto Bob Black como otros observan que no es cierto que cada vez haya menos trabajo sino más. Y puede ser cierto según el enfoque. ¿Por qué entonces, esos temores se hacen realidad tarde o temprano?

Cuando se implementa una aplicación de software, un robot, o se automatizan tareas, o incluso se implementan procedimientos que atacan la discrecionalidad, la arbitrariedad y el uso del poder, en realidad lo que se hace es sofisticar los requerimientos sobre los trabajadores.

No siempre el trabajador está en condiciones de asumir sus nuevas tareas o ser reconvertido a otros puestos y no siempre que esto es posible, el trabajador lo acepta. Algunas veces (y bastante frecuentemente negado insistentemente hasta que hace eclosión) esto se percibe como un "alejamiento de la zanahoria". Cada vez es más difícil hacer valer la experiencia por una cuestión de obsolescencia. Las nuevas tareas (en el mismo puesto u otro) requieren conocimientos previos que no se tienen o bien habilidades cada vez más sutiles que ese individuo no desarrolló porque se comoditizaron mucho después.

La realidad es que el mercado requiere cada vez mayor calificación para el mismo "tipo" de tareas. Y cada vez hay más gente que queda afuera tarde o temprano. Porque tampoco se reconoce el derecho de no querer entrar en el vórtice de la recapacitación eterna, que implica muchas veces sacrificar el tiempo libre.

Atención, muy pocos son capacitados en horario laboral y menos aún aquellos a los que dicha capacitación les alcanza. No sólo la capacitación "in company" no es suficiente para "aprender" sino que tampoco está dirigida a todos los que la necesitan. Dichas capacitaciones son exitosas si el individuo cuenta con conocimientos previos suficientes para dar este nuevo paso. Es una cuestión elemental de "teoría del aprendizaje" totalmente ignorada por los capacitadores, por carencias en el terreno didáctico o bien por falta de tiempo y metodología. Habituados a los resultados de los tests diseñados para ser respondidos exitosamente aún sin comprensión, estos capacitadores muchas veces ni siquiera perciben que estos empleados no están aprendiendo. Y´aquellos que no alcanzan a transformar internamente estas estructuras de conocimiento, intentarán replicar lo que ven que hacen otros, imitar, y tarde o temprano será notorio que no hay una falta de comprensión en sus acciones (resultante de la copia y no del aprendizaje genuino) cuando alguna condición de contexto al variar, los deje en evidencia.

Esta sofisticación conduce además a una mayor burocratización que resulta en una desensibilización de la lógica original de las actividades, pues ésta queda reemplazada por otra lógica: la de la seguridad, el control, el orden, como nuevos valores. Por lo que aquellos que fundaban su autoestima en la realización de una tarea, hoy se sienten perdidos porque su conocimiento se pierde en una miríada de exigencias que no alcanzan a valorar.

La instrucción previa del trabajador si fue lo suficientemente conceptual como para permitirle una actualización no traumática, hará de clasificador, y podrá abrirle puertas accediendo a sueldos similares o aún mayores si logra una reconversión exitosa en estos espacios cada vez más reducidos o, en caso contrario lo expulsará hacia abajo. El trabajador promovido, como resultado, tendrá más trabajo aún que antes.

Yo veo permanentemente cómo muchísimos empleados (white collar) van cayendo exhaustos en esta lucha de mantenerse actualizados. Mientras que antes se desempeñaban adecuadamente, hoy se sienten superados por permanentes y vertiginosos cambios que no llegan a absorber. Y también he sido testigo de la angustia que les produce observar cómo su calificación disminuye e incluso peligra su posición.


Buenos días.



DELIMITACIÓN DE RESPONSABILIDAD: Todas las afirmaciones de este blog son libres interpretaciones mías, sujetas a posibles, abruptos y arbitrarios cambios de opinión sin aviso previo.
Contadores Gratis

No hay comentarios.:

El top ten de siempre